El reto de los 100 granulomas
Comienza un nuevo año, momento de hacer buenos propósitos para que el próximo sea mejor que el anterior. Desde el SESC os proponemos uno para 2019: El reto de los 100 granulomas!
El reto consiste en intentar que durante el 2019 se remitan un mínimo de 100 lesiones granulomatosas observadas en el matadero en canales de vacuno para investigar tuberculosis bovina.
De dónde sale ese número?
En Catalunya se sacrifican cada año alrededor de 500.000 cabezas de vacuno.
El MAPA ha fijado una tasa de remisión de granulomas no tuberculosos del 0.1 (x1000), esto supone que cada año se deberían investigar hasta 50 granulomas no tuberculosas.
La media de confirmación de sospechas de tuberculosis de los últimos 10 años del SESC es del 50%.
Por lo tanto, si durante el próximo año analizáramos 100 granulomas alcanzaríamos este objetivo. Está claro que lo más probable es que al aumentar el número de granulomas investigados disminuya considerablemente el porcentaje de muestras que se confirman como tuberculosis, especialmente ahora que tenemos una prevalencia en rebaños muy baja (por debajo del 0.3%). Pero como contrapunto se consolida la vigilancia a matadero como herramienta de control efectiva de la tuberculosis.
¿Qué lesiones se deben enviar?
Cualquier lesión granulomatosa, nodular o no, con presencia de necrosis, càseum y / o mineralización puede ser compatible con tuberculosis. Especialmente si están localizadas a nivel de nódulos linfáticos o parénquima pulmonar. Pero sin olvidar que la tuberculosis puede afectar a cualquier órgano y que cuando disemina por sangre puede dar lesiones perladas en las serosas.
El objetivo es poder declarar Catalunya como región oficialmente libre de tuberculosis (OTF), por eso es necesario que la prevalencia en rebaños se mantenga por debajo del 0,1% durante 6 años consecutivos. Ya hace años que estamos cerca de esta meta, situación en la que se podría plantear dejar de hacer saneamiento a los rebaños y en la que la vigilancia en matadero sería la única medida de control.
Desde el 2012, un 21% de los nuevos brotes de TBC detectados en Cataluña han sido a través de la vigilancia en mataderos. Pero el número de sospechas no confirmadas es relativamente bajo e irregular a lo largo de los años, por esto es necesario incentivar su envío.
Año | Sospechas de TB | TB confirmada | No-TB | Nº bovinos sacrificados | Tasa de remisión de granulomas no TB (x1000) |
2009 | 54 | 37 | 17 | 473824 | 0,04 |
2010 | 42 | 29 | 13 | 480685 | 0,03 |
2011 | 24 | 11 | 13 | 477388 | 0,03 |
2012 | 18 | 8 | 10 | 477549 | 0,02 |
2013 | 15 | 9 | 6 | 479812 | 0,01 |
2014 | 32 | 16 | 16 | 466705 | 0,03 |
2015 | 36 | 15 | 21 | 499169 | 0,04 |
2016 | 19 | 9 | 10 | 525512 | 0,02 |
2017 | 22 | 6 | 16 | 517.120 | 0,03 |
Tabla 1: Número de sospechas de TB recibidas al SESC en los últimos años. Como se puede ver habrá que hacer un esfuerzo importante para conseguir el reto de los 100 granulomas.
Alcanzar este reto ayudará a erradicar la tuberculosis bovina, pero no es lo único que podemos hacer desde el SESC: hay que poner especial énfasis en el análisis de granulomas también de los posibles reservorios de la tuberculosis: los pequeños rumiantes (cabra y oveja) y, en las salas de manipulación de caza, de la fauna silvestre (especialmente el jabalí).
En este enlace podéis revisar todas las entradas del blog relacionadas con el diagnóstico de tuberculosis en el matadero en las que hay numerosos ejemplos de imágenes de lesiones tuberculosas.
A continuación mostramos imágenes de las últimas sospechas de TBC remesas al SESC.